lunazul

Lunazul

El secreto de la vida

La vida tiene un secreto,
no lo he alcanzado a inhalar,
parece que es un silencio
entre las voces mañaneras,
cuando la luna te impregna
del sueño que se convierte
en la esperanza de tocar el secreto.

{…¿Acaso saber esto me sirve para algo? ¿De qué sirve creer que hay algo más allá de mis sentidos que se puede vivir? Si la creencia, ¿sin raíz será como creer en las nubes de azúcar que jamás se probarán? ¿Cómo se obtiene la raíz? }

Dejé de buscar, el silencio hallé,
estaba dibujado en la paredes
de este cuarto viejo,
viví atrapada tantos años
que el reflejo del exterior
parecía ser más bello.
Belleza sería estar en la esfera
que explota cuando el sol
que alumbra acaricia su exterior.

{… Vienen las palabras, como fuente de agua viva, las escucho escurrirse… Son mis recuerdos, mis sueños y… Pienso. Quizá, si puedo decidir que pensar a voluntad, controlaré mis acciones como debe de ser. Quizá… ¿Será que deberé controlar primero mis acciones?}

El silencio era la puerta del secreto,
cerré los ojos y comencé a observar
el delirio que el mundo anhela.

{…Para hallar el silencio, en paz debería de estar. En él, habitaba un mundo que no se envestía de soledad.}

Sólo en silencio, con las puertas abiertas
y el latido de la sangre, llega la vida,
un susurro del viento entrando por la ventana
sin necesidad de exaltar los suspiros.

[Sí, en casualidades y atención dividida me topé con el secreto de la vida. Tenía frío. El tiempo llevaba una corriente helada que sólo podría mitigarse en el centro de mi casa. Ese lugar sería, la sala, en donde junto a la chimenea entraría a los latidos de mi alma.]

Olor a chimenea

El olor a chimenea vieja
se adueña del medio ambiente,
los colores de fuego lento
se disolvían en el espacio
delimitado por la misma mente.

{… Rodearse mediante anhelos irracionales, sin motivo loable, es como caminar en el hielo más desgarrador sin protección. ¡Cómo se espera cruzar aquello sin lastimarse! Cerrar los ojos no cesará el frío. Se tiene que abrir el alma para caminar hacia donde el fuego está y el hielo se hace agua de vida… Ahí… ¿En dónde el amor late? }

En ese incendio colorido,
recordaba a aquel lugar
que llamamos hogar al caer el sol
entre tus brazos soñadores,
el mar de la esperanza
que me entreteje un futuro incierto,
brazas al mirarme con el alma expuesta.

[ Mientras se quemaban las brazas, entré a un estado al cual comúnmente le llamarían meditación. No lo describiría con esa palabra porque se asocia con algo aburrido o tedioso y no fue así.
Mis brazos estaban relajados a lado de mi cuerpo mientras acostada con las piernas entre abiertas dirigiéndose hacia el fuego, apoyaba mi espalda en el sofá y con los ojos abiertos observando el fuego comprendí... Algo, que me haría ver con mayor claridad ese secreto que se escondía dentro de mí. ]

Que seamos amor

Luz, es amar,
energía, es ser luz,
conciencia es ser energía,
belleza es tener conciencia de la energía,
y ver luz donde se ama lo que se hace.

{… Quiero pensar que todos se han dado cuenta de lo hermoso que somos, pero siento que no es así. Veo a mi alrededor como gente sufre y llora, a pesar de no tener problemas graves. No puedo decir nada, así me pasa a mí, pero… Vivo. Me percato de que me sucede y cambio. Todos somos parecidos en cierta raíz. Sentirlo, es el inicio de la magia.}

Soñemos con ser luz,
que nos dará energía,
que nos entregará el umbral de la conciencia,
que nos dejará embelesados con belleza,
siendo amor.

{…Ahora, no quiero pensar, estoy segura de que todo se puede hacer realidad. No puedo pasar esa seguridad. Ese alguien más, tiene que vivirlo por si mismo. Ni mis palabras, ni mis sueños, ni mis ruegos lo harán. Sólo uno mismo… El único que puede amar, como todo lo ama a él. }

Y hoy, conociendo,
mirando a la luz,
siendo energía,
tengamos conciencia
y seamos amor.

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